ENTRENO Y MOTIVACIÓN-MEP ENTRENADOR PERSONAL BARCELONA

Seguro que en muchas ocasiones te has planteado dejar de entrenar, sobretodo en aquellos días en los que nada te sale bien, en aquellos días que cometes errores tras errores en tu entrenamiento, o que te cansas muchísimo con las rutinas y no acabas de ver resultados .

Pero te digo por propia experiencia que nadie nace enseñado. Yo en los años de atleta de la selección Española tuve la suerte de contar con un excelente entrenador, él me proporcionó  la técnica para mejorar, como la manera de afrontar las metas a conseguir en las competiciones, tanto en las nacionales como internacionales. Los errores estaban presentes, pero mi entrenador hacía que fuera consciente de ellos para que los pudiera modificar. Los errores forman parte del aprendizaje y del camino para conseguir el éxito. Si no se cometen errores no se puede ser consciente de los progresos, el progreso no es más que el resultado de su corrección.

El éxito de un entrenamiento consiste en hacer camino

En el camino inevitablemente se cometen fallos, pero no olvides que tus propios errores te ayudarán a  pensar en cómo puedes hacerlo mejor para lograr un entrenamiento de calidad que garantice que cumplas tus objetivos finales.

Te voy a poner un ejemplo. Un chico de 30 años sale de una lesión de rodilla, el médico le recomienda que haga entrenamientos para aumentar su fuerza y evitar que a la larga le queden secuelas, El chico se apunta al gimnasio y empieza a trabajar ejercicios que le propone su entrenador personal.

Durante los entrenamientos el chico llega a perder el equilibrio haciendo sentadillas, se rasca las rodillas al realizar el peso muerto, y no puede levantar la barra en la cargada por falta de técnica El chico se desmotiva, no ve progreso, sólo ve errores y en muchas ocasiones no logra terminar los entrenos.

Los entrenadores te proporcionan conocimientos

Al preguntar al entrenador sobre cómo debe ejecutar los ejercicios, éste  le recomienda que separe las piernas para lograr más estabilidad a la hora de hacer las sentadillas, que preste más atención en los tres movimientos fundamentales de técnica para el levantamiento de pesas, y por último, le recomienda que si no puede acabar un entreno que lo repita al día siguiente de forma íntegra.

Tras entrenar durante varias semanas ve un progreso importante, consigue hacer sentadillas con 70kg, realiza el ejercicio de peso muerto utilizando la técnica correcta. Gracias a su entrenamiento, ha fortalecido las rodillas, y lo más importante, ha evitado las posibles secuelas tras su lesión.

Las historias particulares nos demuestran los progresos.

Con esta historia solo quiero mostraros que lo importante es conseguir lograr los objetivos y que los errores son parte del proceso de aprendizaje.

Te voy a dar unos consejos para lograr entrenar de forma constante para conseguir tus objetivos.

1) Si abandonas, fracasas directamente, ya que si dejas de entrenar no lograrás conseguir nunca tus objetivos.

2) Proponte objetivos  accesibles a tu estado actual.

3) Analiza tus mejoras tras unas semanas de entrenamiento, comparando el antes y el después.

4) Si no acabas los entrenamientos no pasa nada, El siguiente entrenamiento seguro que lo realizarás mejor.

5) ¿Entrenas lo suficiente para alcanzar tus objetivos?, Repasa tu dieta, tu frecuencia de entrenamiento ¿son suficientes? ¿son correctos?.

6) Se tu propio líder, la disciplina, la autoexigencia y las ganas de triunfar son las tres cualidades de una persona con éxito, éstos tres factores  te llevarán a convertirte en tu propio líder. Pero recuerda siempre, tienes que ser realista, no debes exigirte más de lo que puedas hacer. Intenta, motivarte y darte razones para estar orgulloso de ti mismo, de esa manera completarás tus entrenamientos.

7) Y por  último, habrá días en los que no tendrás ganas de hacer nada, en los  que desearás quedarte en casa, no lo hagas, siéntate y repasa tu objetivo. Pregúntate ¿qué quieres conseguir?. Todos nosotros nos movemos por objetivos, sin objetivos no hay motivación. Vuelve a preguntarte ¿Cuánto has avanzado?. Mira fotos de cómo estabas antes, analiza las cosas nuevas que  has aprendido y puedes hacer. ¿Realmente merece la pena abandonar porque hoy tienes pereza?